Vacio Crónico: Anhelo de Satisfacción
Entre nuestros círculos de familiares, amigos y seres queridos, a menudo entramos en “grandes conversaciones” sobre la vida, el significado, la espiritualidad, el propósito y otros temas que nos obligan a todos a pensar en la existencia. Llegamos a mensajes hilados que terminan diciendo algo así como “Sí, pero ¿qué sentido tiene todo esto?”
La razón por la que personas llegan a esa ansiedad existencial, es debido a que está profundamente relacionada con el Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) acorde a Psiquiatras en Asunción. Uno de los criterios de diagnóstico de esta afección es una sensación crónica de “vacío”. La palabra “vacío” se encuentra entre comillas porque sabemos que el sentimiento no es exactamente el vacío, lo que implica una nada o vacío donde se supone que debe estar algo.

Ciertamente, hay un elemento de sentir algo que falta dentro de la persona, lo que puede llevar a un gran esfuerzo fuera nuestro por estabilidad, identidad y, a veces, intentos desesperados de llenar un vacío emocional, mental o espiritual. En el pasado, esto se pudo haber exhibido a través de cambios de trabajo, apartamentos y socios, así como una relación complicada con la comida (usando la plenitud física como un sustituto de la plenitud del alma).
Pero cuando pienso en el sentimiento crónico que realmente incitó a todos estos comportamientos problemáticos, creo que un término mejor que el vacío podría ser el anhelo. No es solo la falta percibida, es el anhelo de que se llene de amor, conexión y satisfacción. Muchas personas experimentan el deseo de “descubrir” lo que todo significa: lo que queremos decir como individuos, como especies y como seres sintientes en un universo gigantesco. La diferencia es que tener un trastorno límite de la personalidad amplifica el deseo, lo hace más agudo y más persistente.
Aunque la presencia incesante, persistente y vacía pasa factura y puede conducir a las personas a un comportamiento impulsivo y autodestructivo, también es el agua en la que muchos de las personas con TLP nadan constantemente. Cuando personas acuden con sentimientos de desapego por un propósito, o preguntan sobre lo que realmente trae alegría y satisfacción, o simplemente las lágrimas de alguien hambriento de algo difícil de articular, se puede ayudar. Porque se ha aprendido a soportar el vacío y comprender el anhelo.
Existe varias maneras a través del cual podemos expresar estados difíciles. También comprendemos la perspectiva de alguien que mira hacia el abismo todos los días, y que ha llegado a aceptar que para cada uno de nosotros, la luz plena y viva del día siempre se complementa con la tranquila oscuridad de la noche. El desafío de vivir con esta verdad es enorme, pero el conocimiento que se imparte en sesiones de psicoterapia es irreemplazable.
Dr. OSCAR PAATS
Especialista Psiquiatra en Asunción | Adultos, Adolescentes y Niños
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